Descripción
Este corazón de barro, coronado por una flama dorada y ceñido con una serpentina de luz, evoca la intensidad de las promesas eternas. Una pieza que remite al simbolismo devocional, reinterpretada con carácter y textura. Cada detalle revela el paso del tiempo, como si hubiese sido rescatado de un altar antiguo.
Medida aproximada: 18 x 14cm